El embate sin tregua del COVID-19 en Laredo sigue cobrando víctimas, pues las autoridades sanitarias reportaron ayer el deceso de 10 personas más y la aparición de 320 nuevos casos positivos, para un total de 561 fallecimientos y 33,938 contagios, cifras jamás antes alcanzadas.
Son 5 mujeres y 5 hombres los que sucumbieron al virus, en edades que van desde los 30 años (dos), hasta los 90 años de edad, muertes que se presentaron desde el primero de enero, hasta ayer, dice el reporte de actualización de datos pandémicos.
En cuanto a las hospitalizaciones, registra ya un porcentaje del 44.9 por ciento, con 235 pacientes bajo atención médica, de los cuales 78 se encuentran en las salas de Cuidados Intensivos, donde un joven está en terapias de intubación.
Sin embargo, ya son 540 los enfermos que se han recuperado, para un total de 30,899, luego de 228,531 pruebas clínicas detectoras del virus desde que inició la pandemia.