La secretaria de prensa de Estados Unidos, Karoline Leavitt, anunció que influencers, blogueros y youtubers podrán asistir a las conferencias de prensa de la Casa Blanca. La medida busca dar espacio a nuevos creadores de contenido que informan a millones de personas fuera de los medios tradicionales.
Leavitt explicó que los asientos principales en la sala de prensa estarán reservados para figuras de los «nuevos medios», rompiendo con la tradición de asignarlos exclusivamente a periodistas acreditados. Además, la administración de Trump ha restituido 440 pases de prensa que fueron revocados bajo el gobierno de Joe Biden.
La Casa Blanca habilitó un formulario en línea para que creadores de contenido soliciten credenciales de prensa, proporcionando datos personales y enlaces a sus redes sociales. “Millones de estadounidenses, especialmente los jóvenes, consumen noticias a través de podcasts, blogs y redes sociales”, señaló Leavitt, justificando la apertura a estos comunicadores.
La medida ha generado opiniones divididas, con algunos sectores aplaudiendo la inclusión de voces independientes, mientras que críticos la consideran un intento por favorecer a medios afines a Trump. La secretaria de prensa defendió la decisión asegurando que responde al derecho a la libre expresión, reafirmando el compromiso de la administración con la Primera Enmienda.