El cambio de Gobierno y los titubeantes económicos que, por consecuencia propicia, fueron determinantes para crear afectación en el sector restaurantero, que durante el mes de septiembre vio mermadas sus ventas en un 40 por ciento.
“El ámbito económico pareció conjugarse, lo que propició se contrajera el flujo de los recursos, siendo varios sectores afectados, entre ellos nosotros (los restauranteros) al mermar nuestras ventas”, declaró la empresaria Ana Laura García Anzaldúa.
Integrante de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC), estableció que además del repliegue natural del circulante por el cambio de gobierno pegó también a la economía, figuró también el retorno a clases que representa un fuerte gasto en la economía familiar.
“Sin embargo este mes de octubre, noviembre y diciembre son periodos de gran esperanza para el sector restaurantera, propiciando una tendencia de recuperar gastos debido al flujo económico que propicia el cierre de año”, comentó.