El abandono de adultos mayores en nuestra ciudad se ha convertido en un fenómeno social alarmante.
Así lo denunció José Hemin Pascacio Rodríguez, décimo primer regidor y regidor de un sector en el poniente donde actualmente se registra un monitoreo de este preocupante escenario.
“Estamos encontrando en muchos hogares adultos mayores de entre 60 y hasta 85 años en total estado de abandono. He visto casos de personas con más de 6 o 7 meses sin cortarse el cabello y con más de 12 días sin cambiarse la ropa. Humanamente, es muy triste”, señaló.
El regidor compartió que en sus visitas casa por casa —trabajo que ha emprendido como parte de sus responsabilidades— ha detectado ya entre 70 y 80 casos de abandono tan solo en una fracción de su territorio.
“Apenas he recorrido Lomas del Río, La Joya y La Sandía, y ni siquiera he cubierto una tercera parte del sector”, advirtió.
Este fenómeno, que según Pascacio no era común antes de los años 2000, revela una preocupante pérdida de los valores familiares: “Los padres que ahora vemos abandonados son hombres y mujeres que tuvieron dos, tres, hasta siete u ocho hijos. Hoy viven solos y olvidados. Es un acto de ingratitud”, lamentó.
Sin embargo, recordó que la ley está de parte de los adultos mayores. Las recientes reformas al Código Civil Federal permiten que el Estado, a través del DIF y la Procuraduría correspondiente, obligue legalmente a los hijos a cuidar de sus padres si estos les han otorgado o no algún bien en vida, como terrenos o casas.
“Cualquier vecina o vecino puede denunciar estos casos ante el DIF, que debe intervenir. Y si tras buscar la conciliación los hijos no cumplen, entonces se actúa legalmente. Esto no es negociable”, afirmó el regidor.
Pascacio también reconoció que algunos hijos justifican su abandono argumentando malas experiencias en la infancia, pero enfatizó: “A menos que exista un antecedente legal formal, la ley establece claramente la obligación de cuidar a los padres”.
Hizo un llamado a la reflexión: “Nos guste o no, si Dios nos presta vida, un día nosotros también seremos adultos mayores. Lo que hagamos hoy como sociedad marcará el trato que recibiremos mañana”, dijo.