El líder socialdemócrata de Eslovaquia, Robert Fico, es comparado con el húngaro Viktor Orban por su discurso nacionalista, antiinmigrantes y prorruso.
El socialdemócrata populista Robert Fico ganó, el sábado 30 de septiembre, con su partido Smer las elecciones en Eslovaquia, con opciones para volver al poder, que dejó en 2018 en medio de un ola de protestas populares tras el asesinato de un periodista de investigación.Ahora, con un discurso nacionalista, prorruso y contra la inmigración que se asemeja al del líder húngaro Viktor Orbán, el dos veces exprimer ministro eslovaco (2006-2010 y 2012-2018) ha logrado calar entre el electorado, logrando 23 por ciento de los votos.El veterano político, de 59 años, ha sabido explotar el descontento generado entre las clases más desfavorecidas y en el ambiente rural por la inflación, la caída del poder adquisitivo y la gestión errática de la coalición de centro derecha, que perdió el pasado diciembre una moción de censura.Las polémicas propuestas de FicoFico se opone a las cuotas de reparto solidario de refugiados en la Unión Europea que propone Bruselas, promete que si gobierna Eslovaquia dejará de prestar ayuda militar a Ucrania y también que volverá a reforzar sus lazos con Rusia.