Dos jueces federales han ordenado la suspensión provisional de la reforma judicial en México, poniendo un freno temporal a su avance legislativo. Martha Eugenia Magaña, jueza Quinta de Distrito en Morelos, emitió una orden que impide a la Cámara de Diputados discutir y votar el dictamen de la reforma en el pleno, en respuesta a un amparo promovido por un grupo de jueces federales. Estos jueces argumentan que la reforma podría llevar a su destitución sin derecho de audiencia ni indemnización. El fallo definitivo sobre este amparo se espera para el 4 de septiembre.
Por otro lado, Felipe Consuelo Soto, juez Tercero de Amparo y Juicios Federales en Chiapas, también concedió una suspensión que, aunque no impide la discusión o aprobación del dictamen en el Congreso de la Unión, ordena que no se envíe a los congresos estatales para su ratificación una vez aprobado. Este recurso será resuelto el 6 de septiembre.
Estas suspensiones han generado un debate sobre la constitucionalidad de las medidas y han intensificado el conflicto entre el Poder Judicial y el gobierno. Mientras algunos juristas señalan la falta de fundamento constitucional en las decisiones judiciales, otros advierten que el conflicto podría escalar, afectando la independencia del Poder Judicial. La situación pone en pausa temporal el avance de una reforma que, de ser aprobada, podría cambiar significativamente la estructura y funcionamiento del sistema judicial en México.