Otro policía fue arrestado luego de haber sido acusado de haber golpeado y tratado de ahorcar a una mujer, por lo que ya son dos agentes de a ley que van a la cárcel por los mismos cargos, en menos de tres meses.
Se trata de Juan Ángel Leal, de 34 años de edad el cual se entregó a las autoridades el domingo por la mañana, a sabiendas que era buscado por los cargos de asalto doméstico en agravio de una miembro de la familia e impedirle la respiración, en grados de felonía tercera y de clase A.
En el otro caso, Carlos Ibarra, ahora ex policía, recibió las mismas acusaciones el pasado 28 de julio en la madrugada, cuando golpeó a una mujer en un bar de la avenida McPherson, por lo que recibió cargos formales en la corte 111de Distrito y ahora espera su juicio, mientras que la corporación lo cesó de manera indefinida de sus actividades policiacas.
Las acusaciones contra Leal, se iniciaron luego que durante las primeras horas de la mañana del 16 de octubre la víctima denunció que el asalto tuvo lugar en una residencia de la que salió esa misma mañana, donde fue agredida físicamente por el policía, luego de un altercado verbal.
Los investigadores de la Unidad Especial de Investigación de la Policía de Laredo siguieron el caso esa misma mañana y recogieron las declaraciones de la víctima, la que presentaba lesiones corporales visibles, por lo que el oficial se entregó al día siguiente y ahora se encuentra en labores administrativas, sujeto también a una investigación interna.
YA HABÍA TENIDO PROBLEMAS
Juan Ángel Leal ya había tenido problemas con la justicia, pues en febrero del 2020, en Austin, un jurado del condado de Travis lo absolvió de las acusaciones de lesionar a un hombre de Cedar Park, durante una pelea registrada en un bar de la Calle Sexta, dos años antes, en la que participaron otros dos policías laredenses.
Juan Leal, de entonces 32 años, enfrentó un cargo de asalto agravado con un arma mortal por golpear al hombre hasta dejarlo inconsciente en la cantina, después de que otro agente lo tirara al suelo de un puñetazo en la cabeza.








