Aun cuando han sido discretas las últimas lluvias en la región, han sido lo suficientemente generosas para levantar el angustiante periodo sequía y propiciar la recuperación de las presas en los ranchos.
“Partimos casi de ceros en las presas en un gran número de ranchos, pues algunas apenas y permanecían al ras, pero finalmente se logró alguna recuperación al permitir que un buen número de almacenamientos lograran acumular un 30 por ciento de su capacidad”, afirmó el productor ganadero Felipe Javier Fernández Martínez.
El propietario de un rancho productor de ganado hacia la Carretera Ribereña, estableció que ya las primeras lluvias le dieron realce al campo, aunque las necesidades siguen siendo mayores.
“Por fortuna vivimos el periodo de huracanes que se acaba hasta noviembre y según está pronosticado será sumamente generoso con agua a través de varios fenómenos naturales”, comentó.
Destacó la atención que se tiene por la recuperación de las presas Falcón y La Amistad, las que, debido a su marcado gasto de agua, requieren de fuertes tormentas que le permita su almacenamiento del vital líquido.
Actualmente la Presa Falcón aparece con un almacenamiento, considerado crítico, de 9 por ciento del total de su capacidad, en tanto que la Amistad contiene un 22 por ciento, expresó el productor.
Confió en que el periodo de lluvias pronosticado para estos meses pueda recuperar parte del almacenamiento, en la alta probabilidad que la temporada de huracanes traiga el resto del agua que se requiere para recuperación.