El expresidente boliviano Evo Morales denunció este viernes que Donald Trump, entonces presidente de Estados Unidos, financió el presunto golpe de Estado que lo obligó a renunciar en 2019. Morales, quien buscaba su cuarto mandato presidencial, afirmó que el mandatario estadounidense desempeñó un papel clave en desestabilizar su gobierno y señaló que Luis Arce, actual presidente de Bolivia, ha recibido apoyo similar de Estados Unidos para alejarlo del poder.
Morales calificó las acciones de Trump como una intervención directa contra su administración, mientras cuestionaba el reciente apoyo de Arce al exmandatario estadounidense tras su victoria electoral. Durante el polémico proceso electoral de 2019, Morales abandonó la presidencia tras denunciar irregularidades y enfrentamientos que llevaron a su gobierno al colapso. Desde entonces, ha mantenido tensas relaciones con Arce, acusándolo de orquestar un autogolpe con ayuda internacional para consolidar su posición política.
El exmandatario también enfrenta un complejo panorama legal tras ser inhabilitado como candidato presidencial y destituido de la presidencia del Movimiento al Socialismo (MAS) por decisiones del Tribunal Constitucional Plurinacional, las cuales calificó como ilegales. Morales aseguró estar habilitado para competir en futuras elecciones y continúa reuniéndose con sus aliados en el Trópico de Cochabamba, su bastión político.
En medio de estas tensiones, seguidores de Morales han organizado protestas, bloqueos y manifestaciones para defender su liderazgo y exigir soluciones a la crisis económica que afecta al país. Mientras tanto, el futuro político de Morales y su rol en el MAS sigue siendo incierto, con decisiones cruciales pendientes en los próximos días.