En medio del conflicto en Gaza, Estados Unidos ha presentado un proyecto de resolución ante el Consejo de Seguridad de la ONU, solicitando un “alto el fuego inmediato”. Esta acción marca un cambio significativo en la postura estadounidense, que hasta ahora había vetado otras propuestas similares.
El secretario de Estado, Antony Blinken, ha enfatizado la necesidad de detener la violencia para proteger a los civiles de todas las partes involucradas y permitir la entrega de ayuda humanitaria. Además, ha destacado que una operación militar de gran envergadura por parte de Israel en la región de Rafah, en el sur de Gaza, sería un error innecesario.
La propuesta de resolución busca enviar una señal contundente sobre la urgencia de detener el conflicto y liberar a los rehenes israelíes. Sin embargo, aún no se ha programado una fecha para la votación en el Consejo de Seguridad.
Blinken, quien se encuentra en una gira por Oriente Medio, ha mantenido conversaciones en Arabia Saudita y Egipto, buscando apoyo para alcanzar un alto el fuego. Mientras tanto, la situación en Gaza continúa siendo preocupante, con un aumento en el número de víctimas civiles y una creciente amenaza de hambruna.
El bloqueo impuesto por Israel ha dificultado la entrega de ayuda humanitaria, lo que ha exacerbado la situación humanitaria en la región. A pesar de los esfuerzos de mediación internacional, incluyendo propuestas de tregua por parte de Hamas, el conflicto persiste.
La comunidad internacional, junto con Estados Unidos y otros mediadores, enfrenta el desafío de lograr un alto el fuego duradero que garantice la seguridad de todos los involucrados y permita el acceso a la asistencia humanitaria tan necesaria en Gaza.