Si las deudas de tus tarjetas de crédito u otros préstamos ya te quitan el sueño y no quieres ni saber cómo está quedando tu historial crediticio en el Buró de Crédito, lo mejor será enfrentar la realidad y fijarte de una buena vez una estrategia para dejar de darle vueltas al asunto y solucionarlo cuanto antes.
Entre más esperes más feo se pondrá con los intereses acumulados así que decidirte a ordenar tus finanzas personales y tus tarjetas bancarias pueden estar saturadas de modo que los ingresos de tu salario parecerán insuficientes para ver la luz al final del túnel, por lo que será conveniente no dejar `pasar más el tiempo y poner en marcha el siguiente método para acabar con tus deudas.
Será necesario, en primer lugar, que pongas en orden tus finanzas personales, identifiques tus ingresos y descubras tu capacidad de pago, luego te concentrarás en una deuda que debas liquidar primero para que sus intereses no sigan creciendo sin desatender las mensualidades de tus otros productos financieros o bien, consolidar tus deudas.
Así lo conseguirás en el menor tiempo posible.
1. Apégate a un plan. Lo primero es que organices tus cuentas con tu presupuesto mensual. Allí apuntarás en una columna tus fuentes de ingreso, desde tu sueldo principal y sin olvidar los extras que pueden ser comisiones, bonos, propinas o ganancias con un negocio adicional, todo cuenta para salir antes del lío.
En otra columna u hoja de tu cuaderno siguen los gastos, donde priorizarás aquellos en los que no puedes darte el lujo de dejar de pagar, como tu hogar, los servicios domésticos o el transporte al trabajo, descartando los que no sean esenciales para liberar recursos.
También es indispensable que conozcas el estado de tus deudas para que sepas exactamente cómo está la situación y revises el Estado de cuenta de tus plásticos bancarios, además del saldo, podrás guiarte para tu presupuesto al tener allí el registro por categoría de tus egresos, y podrás visualizar fácilmente dónde puedes hacer recortes del gasto hormiga.
2. Concéntrate en una deuda primero. Ve primero sobre la que más intereses te cobre para que no siga actuando como bola de nieve al crecer y crecer.
En esa enfocarás tus esfuerzos si las deudas son en más de una tarjeta de crédito, aplicando los mayores pagos posibles para liquidarla a la brevedad y sin dejar de pagar las demás al menos con el pago mínimo.
3. No pagues solo el mínimo. Si te es posible hacer pagos mayores hazlo, pues verás que el mínimo no te exenta de que los intereses sigan creciendo por lo que habrá que hallar un equilibrio o bien, dedicarle todo a la deuda que quieres detener para que con el dinero que le destinabas saldes las restantes.
4. Consolida tus deudas. Otra opción es consolidar todos tus adeudos en una sola tarjeta que te ofrezca la menor tasa de interés, por medio de una transferencia de saldos.
Esto tiene sus beneficios, pues tendrás todas las cuentas combinadas con una sola fecha de pago para no confundirte, y la tasa más baja hará que no sigan creciendo al elevado ritmo que te descontroló, y así puedas aplicarle todo el esfuerzo hasta eliminarlas.
Cuando hayas acabado con el problema de deudas lo mejor será no “regresar” al estilo de vida que te metió en esa situación en primer lugar, así que el presupuesto te ayudará a no gastar más de lo que tus finanzas soportan, y mejor aún, cuando termines de pagar podrás convertir esa capacidad de pago en capacidad de ahorro para que no vuelvas a estar al límite
