Durante el año pasado en México se registraron un total de 9 mil 181 casos de robo a transporte de carga, de acuerdo con estadísticas alarmantes presentadas por la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (Amesis).
Según la Amesis, el 85 por ciento de estos robos se llevaron a cabo con violencia, en com-paración con el año 2022 el incremento fue de 27 por ciento. Aunque el robo a transporte de carga se ha propagado por todo el país, las cifras revelan que siete entidades son particularmente vulnerables: Estado de México, Puebla, Michoacán, San Luis Potosí, Jalisco, Oaxaca y la Ciudad de México.
El Estado de México lidera la lista con el 45 por ciento de los atracos, seguido por Puebla con el 28 por ciento, mientras que Michoacán, San Luis Potosí y Jalisco se reparten el 14 por ciento restante.
El presidente de la Amesis, Ricardo Bustamante Medina, comentó que “analizamos que, en los hurtos registrados en 2023, el 70 por ciento de ellos ocurrieron en aproximadamente el 9 por ciento del territorio nacional, lo cual denota que esta actividad delictiva se concentra en la región centro del país, por la conectividad carretera”.
Las mercancías más apetecidas por los delincuentes fueron los abarrotes con un 31 por ciento de los casos, seguidos por el acero con el 27 por ciento, el calzado con el 15 por ciento, y los productos perecederos con el 3 por ciento.
Sin embargo, la Amesis presume que el 98.5 por ciento de los vehículos robados fueron recuperados. No obstante, la asociación reconoce que este delito afecta gravemente a los “hombrecamión,” a las empresas transportistas y a las compañías aseguradoras, que se ven obligadas a aumentar sus precios, repercutiendo en el consumidor final.