Tras un trágico crimen escolar, el presidente Emmanuel Macron propuso prohibir por completo el uso de redes sociales a menores de 15 años si la Unión Europea no refuerza pronto sus regulaciones.
En una entrevista con France 2, el mandatario atribuyó la creciente ola de violencia juvenil al deterioro familiar y al impacto nocivo de internet, calificando la situación como una “epidemia” nacional.
El detonante más reciente fue el asesinato de una asistente educativa por un adolescente durante una revisión escolar en Nogent. Frente a este panorama, Macron advirtió que, de no haber avances a nivel europeo en los próximos meses, Francia tomará medidas unilaterales.
Aunque el país ya exige autorización parental para que menores usen redes sociales desde 2023, el presidente considera que estas medidas son insuficientes ante el aumento del 17 % en delitos juveniles en los últimos dos años.
El endurecimiento de reglas incluiría sanciones económicas a plataformas y la prohibición de venta de armas blancas a menores. La propuesta se alinea con esfuerzos globales: Australia ya restringió redes a menores de 16 años, mientras Nueva Zelanda y Noruega evalúan regulaciones similares.
Macron también respalda estudios europeos que vinculan el uso excesivo de redes con ansiedad, acoso escolar y exposición a contenido sexual.