El gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, supervisó recientemente las obras en el Parque del Agua, un ambicioso proyecto destinado a convertirse en una de las principales atracciones turísticas de Monterrey para el Mundial FIFA 2026. La construcción del parque, que se integrará al icónico paisaje urbano de la ciudad junto a la Macroplaza y el Paseo Santa Lucía, avanza a buen ritmo con la meta de finalizar antes del evento deportivo global.
Durante su visita, García Sepúlveda destacó que el Parque del Agua no solo ofrecerá nuevas opciones de esparcimiento para los habitantes de la región, sino que también servirá como un punto de atracción para los miles de turistas que llegarán a Monterrey para el Mundial. «Queremos que Monterrey sea un destino turístico de primer nivel, con espacios públicos como el Parque del Agua, el Parque Fundidora y el Corredor Verde», expresó el gobernador.
El parque, que será conocido afectuosamente como «DIFneylandia», recibirá un homenaje especial a más de 500 menores en situación de vulnerabilidad, quienes tendrán acceso prioritario a las instalaciones. Con una inversión estimada en 2,022 millones de pesos, el Parque del Agua se ha convertido en una de las 20 obras prioritarias del Proyecto de Egresos del estado.
Bernardo Bichara, presidente del Consejo de Administración del Parque Fundidora, resaltó el impacto positivo que tendrá el nuevo parque en la calidad de vida de los ciudadanos, tanto en términos de recreación como en beneficios ambientales. La obra, que comenzó en mayo de este año, ha avanzado significativamente con la demolición de estructuras existentes y la preparación del terreno para la construcción.
La primera etapa del proyecto ha implicado la limpieza y desmonte del área, y actualmente se están realizando trabajos preliminares como la perforación y construcción de pilotes para el techo de la «Serpiente», una estructura paisajística que será el edificio sombreado más largo del mundo en un parque metropolitano.
Con un área de 78 hectáreas, el Parque del Agua promete ser un oasis urbano que fusionará elementos de bosque con instalaciones recreativas, andadores, áreas de juegos, reservorios y humedales, promoviendo un estilo de vida al aire libre y el desarrollo sostenible en Monterrey. El parque está previsto para ser inaugurado en febrero de 2026, justo a tiempo para recibir a los visitantes del Mundial FIFA.
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