Petróleos Mexicanos está desarrollando reglas para aplicarse un precio interno al carbono por sus operaciones, afirmó el director de finanzas.
La emisión de contaminantes comenzará a costarle dinero a Petróleos Mexicanos (Pemex), ya que se encuentra desarrollando reglas corporativas para integrar un precio interno del carbono a sus operaciones, afirmó Carlos Cortez, director corporativo de finanzas de Pemex.
“(Estamos incorporando) dentro de nuestras reglas corporativas la incidencia de impacto del cambio climático en la toma de decisiones financieras para la aprobación de nuestros proyectos de inversión mediante la integración de un precio interno del carbono, es algo que ya estamos evaluando”, dijo el directivo en una llamada con inversionistas.
El precio interno del carbono consiste en atribuir un valor y poner un precio a las emisiones de dicho contaminante, con el objetivo de crear un incentivo para que las empresas y personas físicas cambien sus patrones de inversión, producción y consumo, según información del Banco Mundial.
Este tipo de regulación será clave para el futuro de la petrolera, ya que la aprobación de nuevos proyectos de inversión y las decisiones financieras de la empresa dependerán de la incidencia que tengan esos proyectos en el cambio climático.
“Las asignaciones presupuestales de Pemex se deben orientar principalmente a los temas de mantenimiento y rehabilitaciones con impacto en nuestra agenda de sostenibilidad, las líneas de negocio de Pemex deberán considerar estas actividades dentro de sus más altas prioridades”, apuntó Cortéz.
Por lo tanto, Pemex buscará en los próximos meses crear normas que prioricen la asignación de recursos de naturaleza Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG), así como mejorar la taxonomía financiera de la petrolera, con el objetivo de transparentar las erogaciones financieras en materia sustentables.