Yolanda Saldívar, actualmente cumpliendo cadena perpetua por el asesinato de la icónica Selena Quintanilla en 1995, ha vuelto a afirmar que el disparo que le quitó la vida a la cantante fue accidental. A punto de cumplir 29 años desde aquel trágico 31 de marzo, Saldívar busca su liberación condicional en marzo de 2025 y se considera víctima de lo que denomina una «persecución política».
En un documental reciente, «Selena & Yolanda: The Secrets Between Them», Saldívar expresó su sentir, declarando que fue condenada por la opinión pública antes de su juicio y que nunca tuvo la intención de matar a la estrella de 23 años.
Familiares de Saldívar, que han descrito su encarcelamiento como el de una «presa política», han manifestado que es hora de que reciba la libertad que cree merecer. «Ya es suficiente. En este momento se siente como una prisionera política. Está lista para salir de la cárcel porque cree que ha cumplido con creces su condena», señalaron a The New York Post.
Saldívar ha estado en prisión desde el fatídico día en 1995, cuando disparó a Selena en un hotel de Corpus Christi, Texas, después de una discusión. A pesar de argumentar que el disparo fue accidental y que su intención era suicidarse, el jurado la condenó a cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional después de 30 años.
La asesina ha presentado quejas sobre sus condiciones de vida en prisión y, en 2017, presentó una demanda federal alegando que eran «inseguras y peligrosas». Sus familiares confían en que la junta de libertad condicional considere su caso el próximo año, argumentando que ha pagado suficientemente por sus acciones.
