Estados Unidos ha catalogado como “irresponsable” la advertencia del presidente ruso, Vladimir Putin, sobre el riesgo de una guerra nuclear. A pesar de la retórica, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, afirmó que no hay indicios de peligro inminente. Miller destacó que ya se ha comunicado de forma privada y directa con Rusia sobre las consecuencias del uso de armas nucleares, pero subrayó que no tienen señales de que Rusia esté preparándose para utilizar armas nucleares.
Putin emitió la advertencia en respuesta a las menciones del presidente francés, Emmanuel Macron, sobre la posibilidad de enviar soldados a Kiev. Putin afirmó que cualquier acción de este tipo podría tener “consecuencias trágicas” y destacó que la mención de tales escenarios representa una amenaza real de un conflicto que involucre armas nucleares, lo que podría resultar en la destrucción de la civilización.
El líder del Kremlin compareció con mayor confianza que el año pasado, ya que sus tropas se encuentran en una posición más favorable en la actual invasión a Ucrania. A pesar de algunos retrocesos anteriores, las fuerzas rusas ahora se mantienen a la defensiva, enfrentando dificultades logísticas y una resistencia ucraniana. Putin, en un discurso ante la Nación, delineó un programa estratégico hasta 2030, proyectando su liderazgo continuado en las elecciones próximas, que se anticipa sin oposición significativa del 15 al 17 de marzo.