Arnold Schwarzenegger, icónico actor y exgobernador, se vio envuelto en un incidente peculiar en el aeropuerto de Munich, donde fue detenido por las autoridades alemanas al no declarar un valioso reloj de la marca suiza Audemars Piguet al ingresar al país.
De acuerdo con Thomas Meister, portavoz oficial, Schwarzenegger enfrentará un proceso fiscal penal debido a la omisión en la declaración de este artículo importado de un país no perteneciente a la Unión Europea. A pesar de haber sido liberado después de más de dos horas de retención, el actor demostró total colaboración durante la situación.
Fuentes cercanas al incidente revelan que Schwarzenegger, en ningún momento, fue solicitado para llenar un formulario de declaración, aunque respondió con honestidad a todas las preguntas de los funcionarios de aduanas. El objeto en cuestión, un reloj de lujo suizo, estaba destinado a ser subastado en un evento benéfico en Kitzbühel, Austria.
Según la fuente, el actor accedió a pagar de antemano los posibles impuestos sobre el reloj, pero se encontraron con dificultades cuando los agentes no pudieron procesar el pago a través de una terminal de tarjetas de crédito. Tras más de una hora de intentos infructuosos, optaron por llevar a Schwarzenegger a un banco para que retirara efectivo de un cajero automático.
Sin embargo, el cajero automático tenía un límite insuficiente y el banco estaba cerrado. Tras este inconveniente, un nuevo agente llegó con otra terminal que finalmente funcionó con la tarjeta del actor. Este episodio, descrito como una “comedia de errores”, ha generado atención y comentarios irónicos sobre la situación que podría protagonizar una película cómica.