Un hombre atraviesa con su vehículo la entrada del templo, le prende fuego al edificio y dispara al menos contra una decena de personas; es abatido por la policía
Detroit.-Un hombre atravesó con su vehículo la entrada de un templo de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en el estado de Michigan, Estados Unidos, le prendió fuego al edificio y disparó al menos contra 10 personas, matando a 5 de ellas, informó el domingo la policía local.
El tirador salió de su vehículo disparando un arma de tipo asalto, dijo William Renye, jefe de policía de Grand Blanc, una pequeña comunidad de 7 mil 700 habitantes a unos 100 kilómetros al noroeste de Detroit.
“OREN por las víctimas y sus familias. ¡ESTA EPIDEMIA DE VIOLENCIA EN NUESTRO PAÍS DEBE TERMINAR, INMEDIATAMENTE!”, escribió el presidente Donald Trump en su plataforma Truth tras ser informado del atentado.
El atacante fue identificado como Thomas Jacob Sanford, un hombre de 40 años de Burton, Michigan, quien fue abatido en un intercambio de disparos con dos agentes que acudieron con rapidez a la iglesia, dijo el jefe policial.
Es posible que se registren más víctimas conforme retiren escombros. William Renye añadió que cientos de personas se encontraban en la iglesia, que se incendió cuando el vehículo se estrelló contra ella.
El humo salía del edificio mientras los bomberos intentaban apagar las llamas, con varios camiones de bomberos y vehículos de emergencia aparcados en las inmediaciones, según mostraron imágenes en las redes sociales.
Renye dijo que las autoridades creen que encontrarán más víctimas entre las ruinas. “Mi corazón se rompe por la comunidad de Grand Blanc”, dijo la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, en un comunicado publicado en las redes sociales. “La violencia en cualquier lugar, especialmente en un lugar de culto, es inaceptable”.
La fiscal general Pam Bondi, afirmó en la red social X que “semejante violencia en un lugar de culto es desgarradora y escalofriante”. Trump señaló que el tiroteo “parece ser otro ataque dirigido contra los cristianos en Estados Unidos de América”, precisando que el FBI estaba en el lugar.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es conocida informalmente como los mormones.
El tiroteo ocurrió la mañana después de que Russell M. Nelson, el presidente más anciano de la historia de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, falleciera a los 101 años.
Se espera que el próximo presidente de la Iglesia mormona sea Dallin H. Oaks, según el protocolo de la Iglesia.
“La iglesia está en comunicación con la policía local al tiempo que continúa la investigación y a medida que recibimos actualizaciones sobre el estado de los afectados”, indicó Doug Anderson, portavoz de la fe con sede en Utah, en un comunicado.
Algunas enfermeras en huelga en el cercano Hospital Henry Ford dejaron la línea de piquete y corrieron la corta distancia hasta la iglesia para ayudar a los socorristas, según Dan Glass, presidente del sindicato Teamsters Local 332, quien se enteró del tiroteo.