En una lamentable noticia, la Secretaría de Salud de Nuevo León ha confirmado que 36 personas han perdido la vida debido a un golpe de calor en la región.
Según informó la funcionaria estatal Alma Rosa Marroquín, la mayoría de las víctimas sufrían de comorbilidades.
De los 36 fallecidos, 25 eran hombres y 11 mujeres.
La Secretaría de Salud ha identificado que aproximadamente el 80% de estas personas tenía una comorbilidad preexistente. Además, se ha observado que el 69.4% de los fallecidos eran hombres, mientras que el 30% eran mujeres.
La funcionaria destacó que los grupos de edad más afectados por esta tragedia fueron aquellos mayores de 66 años.
Estos datos resaltan la importancia de tomar medidas de precaución, especialmente durante los periodos de altas temperaturas, y prestar especial atención a las personas con condiciones médicas preexistentes.
Es fundamental que las autoridades y la comunidad en general trabajen juntas para brindar información y concientización sobre los riesgos del golpe de calor, así como para garantizar la atención médica adecuada y oportuna a aquellos que están en mayor riesgo.
Esta tragedia en Nuevo León nos recuerda la necesidad de cuidar nuestra salud y la de quienes nos rodean, especialmente en situaciones extremas como las altas temperaturas.