Los reyes de España, Felipe VI y Letizia, han anunciado que regresarán a Valencia, donde se han comprometido a brindar apoyo tras las devastadoras inundaciones. En su primera visita, apenas cinco días después del desastre, fueron recibidos con hostilidad, lanzamientos de lodo y gritos de “asesinos” por parte de los residentes. La reacción de los valencianos reflejaba una creciente frustración hacia las autoridades, a quienes acusan de “comerciar con la miseria” en medio de la tragedia.
El monarca, en su declaración desde la base militar de Bétera, afirmó su intención de regresar para apoyar a los afectados, aunque consciente de la tensión social y con la determinación de “estar en el lugar adecuado”. En su visita inicial, Felipe VI y Letizia estuvieron acompañados por el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón. La comitiva, que se trasladó al epicentro de las inundaciones en Paiporta, se enfrentó a un ambiente de gran crispación que obligó a la evacuación de Sánchez y la retirada de Mazón.
Tras los incidentes, los reyes adaptarán su agenda, que incluirá recorridos por instalaciones militares en Valencia y la visita a un buque donde se albergan soldados para asistir en las labores de reconstrucción.