El gobierno de Laredo archivó demanda contra autoridades federales para frenar el envío de inmigrantes a esta comunidad, algunos de ellos afectados por COVID-19.
Esperan una audiencia para dirimir las preocupaciones de las autoridades frente a los desafíos que representa la pandemia.
El alcalde Pete Sáenz Jr., habría indicado que arribaban entre 250 a 300 inmigrantes en autobuses desde el Valle del Río Grande a los refugios Holding Institute y Catholic Charities.
En el cuerpo de la demanda incluyen los Estados Unidos de América, el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, el secretario Alejandro N. Mayorkas, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos y su alto funcionario Troy Miller, además de la Oficina de la CBP de los Estados Unidos, la Patrulla Fronteriza y su jefe Ronde S. Scott por mantener diario el desplazamiento de migrantes a Laredo.
La semana pasada se registraron reuniones con enviados de Seguridad Interna de los Estados Unidos en el Departamento de Bomberos donde se expusieron las preocupaciones.
En Del Mar Boulevard un grupo de 20 personas protestaba por los migrantes y otros también se arremolinaron frente a Holding Institute.
Habrán de esperar a que los tribunales federales fijen una fecha de audiencia donde podrá un tribunal federal considerar las opciones y preocupaciones con la oleada de inmigrantes.
El pastor Mike Smith dijo que solamente un porcentaje se había detectado con COVID-19 a los que se les aisló, luego que la autoridad médica declaró cuarentena en Holding.
Un promedio de ochenta personas inmigrantes aceptadas por Seguridad Nacional fue aislado por dar positivo a COVID cuando arribaron al albergue de Holding. La autoridad quiere que dejen de enviar más inmigrantes.