Laredo, Tx.- Las autoridades sanitarias alertaron ayer que Laredo sigue estando bajo ataque pandémico del COVID-19 por lo que sigue siendo necesario realizar grandes convivencias, ya que a consecuencia de las celebraciones del pasado Domingo de Pascua fallecieron tres miembros de una sola familia, los que aparentemente no estaban vacunados.
“El virus sigue presente en la comunidad”, afirmó el doctor Víctor Treviño, Autoridad Médica del Departamento de Salud durante la conferencia de prensa de los jueves, en la que urgió a quienes no han recibido la vacuna a que acudan a inyectarse cuanto antes.
Reiteró que estos tres fallecimientos muestran que aún no es tiempo de realizar grandes celebraciones en los hogares sin seguir las pautas de salud pública ni saber el estado de vacunación en que se encuentran los que ahí se reúnen.
Indicó que si el número de las infecciones ha bajado drásticamente, es porque las vacunaciones han avanzado, no porque el virus se haya alejado, sino por el contrario: sigue constituyendo todavía una amenaza.
Por otro lado y hablando de la vacunación, Guillermo Heard, director del Manejo de Emergencias y jefe del Departamento de Bomberos informó que en esta misma semana y con el apoyo de los soldados de la Guardia Nacional empezarán a inmunizar a los adolescentes de 16, 17 y 18 años de edad, para lo cual se programarán con los distritos escolares de UISD y LISD y escuelas privadas, para centrarse en este segmento poblacional.
Mientras, dijo, las jornadas continúan avanzando y abarcando más terreno dentro del combate a la pandemia, pues Laredo sigue recibiendo más dotaciones de más biológico, para que los residentes se vacunen las dos dosis de Moderna y Pfizer.
También, Heard anunció que ya se prevé desmovilizar el Centro de Infusiones que estuvo operando varios meses con terapias de anticuerpos monoclonales, así como también el Centro Alternativo de Salud, pues ya los números pandémicos se han reducido y la vacunación ha alcanzado más cobertura.