En vísperas de la segunda investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha reafirmado la soberanía nacional y anunciado medidas de apoyo para los mexicanos residentes en territorio estadounidense.
Desde Chinantla, Puebla, Sheinbaum enfatizó que México “no es colonia de nadie, no es protectorado de nadie”, subrayando la independencia y libertad del país.
Ante las declaraciones de Trump sobre posibles deportaciones masivas y la imposición de aranceles si México no controla la migración y el narcotráfico, la mandataria aseguró que los consulados mexicanos en Estados Unidos están preparados para brindar asistencia legal a los connacionales que enfrenten procesos de deportación.
Sheinbaum destacó la importancia de los migrantes mexicanos para la economía estadounidense, señalando que casi 40 millones de personas en Estados Unidos son de origen mexicano, y al menos cinco millones viven sin documentación.
Además, la presidenta informó que México está listo para recibir y apoyar a aquellos connacionales que sean repatriados, garantizando su reintegración y bienestar en el país.
En respuesta a las políticas migratorias anunciadas por Trump, diversas organizaciones de migrantes en Estados Unidos están planificando protestas y huelgas para demostrar su importancia en la economía estadounidense.
La comunidad latina en ciudades como Chicago enfrenta una ola de temor y ansiedad ante el regreso de Trump a la presidencia, temiendo deportaciones masivas y redadas migratorias.
Sheinbaum reiteró el compromiso del gobierno mexicano de defender a sus ciudadanos en el exterior, aumentando la presencia de abogados en los consulados para brindar apoyo legal y asegurando que quienes retornen a México sean recibidos con los recursos necesarios para su reintegración.