El delantero húngaro Martín Ádám, que juega para el Ulsan Hyundai y mide 1.91 metros, ha sido blanco de críticas por su aspecto físico tras participar en la Eurocopa 2024. Ádám, de 29 años, respondió a estas críticas afirmando que su forma física es producto de su genética y que no puede cambiarla.
«Por supuesto que me llegaron uno o dos comentarios, normalmente me río de ellos. Nací así, es la forma de mi cuerpo… No puedo cambiar mi genética», dijo Ádám en una conferencia de prensa.
En la Eurocopa 2024, Ádám ha jugado en dos partidos con Hungría, acumulando 26 minutos de juego. Su equipo perdió 1-3 contra Suiza y 0-2 ante Alemania en sus primeros dos encuentros del torneo. A pesar de las críticas, Ádám se ha mantenido enfocado en su desempeño y contribución al equipo.
Los números del delantero en el torneo incluyen un 80% de precisión en el pase y una velocidad máxima alcanzada de 28.7 km/h.
A través de su respuesta, Martín Ádám ha demostrado una actitud resiliente frente a las críticas y ha reafirmado su compromiso con su equipo y su carrera.