El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se enfrentó a manifestantes pro-palestinos durante un discurso sobre atención médica en Raleigh, Carolina del Norte. Dos personas interrumpieron el evento con gritos sobre la atención médica en Gaza, acusando a Biden de ser cómplice del genocidio debido a los bombardeos en hospitales de la región.
Mientras eran escoltados fuera, los manifestantes continuaron expresando sus preocupaciones sobre la situación sanitaria en Gaza. Biden, en una respuesta sorprendente, reconoció la validez de sus puntos de vista, afirmando que «todos merecen atención médica» y pidiendo paciencia al público con los manifestantes.
Después de que los manifestantes fueran sacados del lugar, Biden declaró: «Tienen razón. Necesitamos prestar mucha más atención a Gaza». Esta respuesta fue recibida con aplausos y muestras de apoyo por parte de la audiencia presente en el evento.
La protesta tuvo lugar un día después de que el Consejo de Seguridad de la ONU adoptara su primera resolución pidiendo un «alto el fuego inmediato» en Gaza, una medida que Estados Unidos, en esta ocasión, decidió abstenerse de bloquear.
Mientras tanto, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha amenazado con romper relaciones diplomáticas con Israel si este último no cumple con la resolución de cese al fuego en Gaza. Petro ha expresado su firme apoyo a la causa palestina y ha instado a la comunidad internacional a tomar medidas enérgicas contra Israel si no se implementa la tregua exigida por la ONU.
Estas declaraciones de Petro se suman a su historial de críticas hacia Israel, especialmente en relación con el conflicto en Gaza. Colombia ha suspendido la compra de armas a Israel en el pasado como respuesta a incidentes violentos en la región, reflejando una postura cada vez más crítica hacia las acciones israelíes por parte del gobierno colombiano.