POR JOSÉ INÉS FIGUEROA VITELA
“La voz del pueblo es la voz de Dios”, reza el proverbio que sugiere que la opinión pública, es la manifestación de la voluntad divina y, por lo tanto, debe ser respetada. “En esencia, implica que la sabiduría y la verdad provienen del pueblo en su conjunto”, de acuerdo a la definición extraída del internet.
En mes y medio, prácticamente se duplicó la intención de los ciudadanos de acudir a votar el próximo domingo primero de junio, por los nuevos juzgadores de nuestro país que iniciarán funciones en octubre.
La reciente encuesta de Enkoll, auspiciada por el periódico español El País y la radiodifusora nacional W, levantada entre el 18 y el 20 de este mes -la semana pasada-, estima que el 22.9 por ciento serán los ciudadanos que ejercerán el voto en las urnas en cosa de cuatro días que se celebrará la elección.
La misma casa encuestadora, a principios del mes pasado había registrado la intención del voto para esta jornada, en base a mediciones profesionales, por el orden del once por ciento; es decir, en este lapso aumentó a más del doble.
¿Qué puede pasar en estos últimos días previos a la jornada votacional? Solo cosas buenas a favor del proceso.
Hablando de encuestas, posicionamientos y prospectivas, otros resultados de mediciones se han conocido por estos días que, sin tener qué ver directamente con la elección judicial, de alguna manera ilustran el momento con su entorno.
Del cuño de Buendía y Márquez, para El Universal, se publicó la encuesta de perfilamientos hacia las elecciones generales del 2 mil 27, en la que se confirman las tendencias reportadas por los últimos procesos electorales constitucionales.
En síntesis, que MORENA le da cuatro tantos en simpatías, por sobre sus principales opositores, polarizados, en el escenario de crecimiento de Movimiento Ciudadano, contra el estancamiento y disminución de los viejos partidos del siglo pasado, el PRI y el PAN.
En números, la intención del voto para las siguientes elecciones legislativas y gubernamentales a favor de MORENA, le ubican en el 43 por ciento, mientras el PAN cae al 10 por ciento y el PRI al 9 por ciento, donde ya lo empató MC, cuya curva creciente contrasta con la caída constante de los otros dos.
Ahí muy cerca, rondan los aliados de MORENA, el Partido Verde Ecologista y el Partido del Trabajo, cuya eventual congruencia y lealtad puede llevarlos a disputar la segunda posición electoral en un futuro no muy lejano.
La encuesta de Electoralia, también recién publicada sobre la elección Municipal de Durango, coincidente con la elección judicial, resulta harto ilustrativa.
Las ventajas del candidato de MORENA y sus aliados a la alcaldía, JOSÉ RAMÓN ENRÍQUEZ, se miden en casi diez puntos porcentuales sobre el abanderado de la coalición prianista, TOÑO OCHOA y mucho más distante del emecista FRANCISCO FRANCO, quien se queda en el diez por ciento.
Lo que se complementa y no es mayormente distinto respecto de Gómez Palacio, del mismo Estado, con un 42 por ciento a favor de la morenista BETZABÉ MARTÍNEZ, contra el 19 del prianista RAUL MERAZ y el 37 del emecista OMAR CASTAÑEDA.
La tendencia en las elecciones constitucionales tradicionales -legislativas y ejecutivastienen fiel reflejo en este inédito proceso para elegir a los integrantes del Poder Judicial.
“La gente muestra esperanza y confianza en la reforma judicial, acuden a votar por responsabilidad”, declaró la directora de Enkoll, HEIDI OSUNA, en el epílogo de sus encuestas respecto de esa elección, cuya culminación toca a la puerta.
Ese es el espíritu que pervive, en el cierre del periodo destinado para el obstaculizado proselitismo este miércoles, y el inicio del periodo de reflexión, en los tres días previos a las votaciones.
Hay muchos que han querido impedir la renovación del Poder Judicial, por los beneficios que les ha reportado el status quo de complicidades y prebendas.
Son muchísimos más, quienes han sido víctimas, testigos de la putrefacción del viejo sistema y militantes de la tesis del cambio verdadero, profundo, definitivos en el andamiajes jurisdiccional.
De esa masa dominante, es que conforme se acerca la hora de las votaciones, se siguen dando los pronunciamientos a favor de ir a votar y que los nuevos juzgadores, en todos sus niveles, respondan al interés del pueblo, al estado de derecho, al imperio de la justicia, alejados de cochupos y distracciones. Que así sea.