JOSÉ INÉS FIGUEROA VITELA
Pepe pide la pelota; Lupe se la pasa; Luis pisa la pelota… la pelota es de todos. Así, como en los juegos de palabras, con los que de niños nos enseñaron a socializar y crecer en valores, los Poderes del Estado andan por rieles de entendimiento, colaboración y respeto.
Todo, bajo una premisa: el derecho y la oportunidad de acceder a mayores estadios de bienestar, priorizando a los más necesitados.
Para lograrlo, ayer se reconoció en “los honores de la semana”, tenemos un Congreso Local con sello internacional, trabajando alineado en aquellos objetivos comunes.
Sin tanto aspaviento, la representación popular tamaulipeca recibió la certificación ISO 9001:2015; un papel, sí, pero uno que representa orden, transparencia y eficiencia, puestos al servicio de la sociedad. No cualquiera.
Menos en un país donde la confianza en las instituciones públicas se desgastó tanto, hasta el punto de la pérdida total.
El gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, no lo dejó pasar desapercibido, encabezando desde el mezzanine del Palacio Legislativo, la ceremonia cívica con la que cada seman honra a los símbolos de la patria y el estado, en el legado de sus próceres.
Ahí estuvo él, junto al Magistrado Presidente, la Guardia Nacional y los diputados locales encabezado por el Presidente de la Junta de Gobierno, HUMBERTO PRIETO HERRERA.
Con honores, banderas y discurso, AMÉRICO reconoció que esta legislatura se ha portado a la altura, que llamó madurez política, de las diferentes expresiones de participación ahí representadas.
S e c e l e b r a b a e l Día Internacional del Parlamentarismo y, de paso, el cierre del segundo periodo ordinario del primer año legislativo; una fecha redonda, para el recuento y el aprecio de los alcances cristalizados.
Y para presumirlo, faltaba más, el Diputado Presidente llevó las cifras en la mano: 29 sesiones, más de 150 reuniones de comisiones, casi 400 asuntos legislativos atendidos, en los que dominó la alineación de aquellas metas ue desembocan en el interés colectivo.
Más allá del número, lo sustancial está en el fondo, desde la reforma al Poder Judicial, en lo que fuimos el primer estado que se atrevió a renovar el sistema desde dentro, de manera total. No fue cualquier cosa.
Jueces elegidos con legitimidad, en procesos democráticos, por sobre todas las adversidades naturales y las puestas por los adversarios; un mensaje claro de que la transformación también va en serio desde el Poder Legislativo. Y con eco en Palacio de Gobierno.
Porque si algo ha dejado claro esta legislatura, es su papel de aliada del proyecto de nación, a la vista de las aprobaciones en línea directa, con las iniciativas de la Presidenta de la República CLAUDIA SHEINBAUM PARDO.
Reformas con impacto real: contra el feminicidio, por la niñez migrante, por la equidad, por la seguridad, por la paridad y protección de los grupos vulnerables, mujeres, niñas, niños, personas con alguna discapacidad y a favor del desarrollo.
La cercanía con el pueblo, otra premisa de presencia en territorio, con Congresos Itinerantes que sacan el debate de las paredes de mortero para explayarse frente a los ciudadanos por las distintas regiones.
Con el único convenio que ha el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo con una instancia de esta naturaleza, alineando el trabajo legislativo a la Agenda 20-30, el Congreso tamaulipeco se puso en otro nivel.
Uno donde lo simbólico se convierte en estructura, voluntad, trabajo y resultados. Así, mientras otros se pelean por el control político, económico o social, aquí se presume la coordinación, los puntos de encuentro, el entendimiento que abone al bienestar de las personas, entre poderes, entre niveles, entre ciudadanos y representantes.
A eso le llama el gobernador “restaurar la confianza”, desde la célula de la representación ciudadana, precisamente el Congreso.
Y en tiempos como estos, eso es mucho decir. Cumplidos los protocolos, el gobernador y su equipo se fueron a cumplir su agenda, en seguimiento a las torrenciales lluvias que, afortunadamente, dejaron más beneficio que pejuicios, estos últimos en los que se dispuso el auxilio institucional.
Y en el Congreso, los diputados en pleno clausuraron el segundo periodo ordinario de sesiones del primer año de ejercicio, eligiendo e instalando a la diputación permanente que fungirá durante el receso los siguientes tres meses. La preside el diputado sureño FRANCISCO ADRIÁN CRUZ MARTÍNEZ