Viene desde Canadá y la reciben en el puente Internacional I, en su paso rumbo a la Basílica de Guadalupe, en Monterrey
La Diócesis de Nuevo Laredo participó en la ceremonia especial realizada ayer en la mañana en las inmediaciones del Puente Internacional I, para recibir la Rosa de Plata proveniente de Canadá.
“Nos alegramos por este acontecimiento tan importante, desde que Santa María de Guadalupe llegó a México, lo hizo para unir naciones y culturas y lo sigue haciendo en este marco de preparación a los 500 años de su aparición”, señaló el Vicario General de la Diócesis de Nuevo Laredo, Padre Jesús Tijerina, en representación del Administrador Apostólico, Monseñor Rogelio Cabrera López.
James Tamayo, Obispo de la Diócesis de Laredo, Texas, expresó la alegría de representar a un país que recibe y a la vez entrega esta rosa como símbolo de hermandad entre ambas naciones.
“Nos reconocemos como hermanos e hijos de Dios y no solo entregamos esta Rosa sino también nuestros corazones y nuestra amistad”, externó.
En estas fechas la Rosa de Plata recorre distintas ciudades y provoca este encuentro de fe y hermandad entre los pueblos y las razas; teniendo como destino final la Basílica de Guadalupe, en Monterrey, Nuevo León.
Cada año el recorrido de la Rosa de Plata en Nuevo Laredo es organizado y custodiado principalmente por los Caballeros de Colón en colaboración con las autoridades religiosas locales.









