El Liverpool rindió un sentido homenaje a Diogo Jota con una victoria de 3-1 frente al Preston North End en su primer amistoso de pretemporada tras la trágica muerte del delantero portugués. El encuentro, disputado en el estadio Deepdale, reunió a jugadores, cuerpo técnico y afición para recordar al atacante que dejó una huella imborrable en el club. Antes del silbatazo inicial, ambos equipos portaron brazaletes negros y guardaron un minuto de silencio, mientras el himno de los Reds se entonaba con la grada llena de camisetas y bufandas en su honor.
Jota, quien falleció junto a su hermano André Silva el pasado 3 de julio en un accidente automovilístico en España, había celebrado su boda apenas once días antes del trágico suceso. El técnico Arne Slot recordó a su jugador como un “campeón para su familia, su país y para este equipo”, destacando que en su último mes de vida logró consagrarse en todos los ámbitos, al ganar la Liga de Naciones con Portugal y la Premier League con Liverpool.
En la cancha, Mohamed Salah encabezó al equipo como capitán, mientras figuras como Van Dijk y Robertson siguieron el homenaje desde la tribuna. Al término del partido, los cánticos para Jota retumbaron con fuerza. El club también confirmó la decisión de retirar el dorsal número 20 como muestra de respeto eterno a uno de sus jugadores más queridos.
Liverpool transforma su dolor en motivación y abre así una nueva temporada impulsada por la memoria de un futbolista que, a sus 28 años, dejó una marca que trascenderá generaciones en Anfield.