La bancada de Morena, junto con sus aliados PT y PVEM, ha respaldado con 19 votos a favor, nueve en contra y cinco abstenciones, las designaciones de magistrados para salas regionales del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA). La oposición, compuesta por diputados y senadores del PAN, PRI, MC, PRD y el Grupo Plural, ha votado en contra, argumentando que los perfiles propuestos por el presidente Andrés Manuel López Obrador no son idóneos debido a posibles conflictos de interés y falta de experiencia para el cargo.
Entre los magistrados nominados destacan dos exmilitares: Miguel Carrasco Hernández, miembro del Consejo de Administración del AIFA y fiscal general de Justicia Militar. Además, se señala que algunos trabajan en la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República, son funcionarios del Gobierno de Tabasco, y Magali Iraís Mendoza Ríos es hija de la Consejera Jurídica, María Estela Ríos, quien fue propuesta por López Obrador para la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Algunos legisladores de la oposición han expresado preocupación por lo que consideran un posible conflicto de interés y falta de experiencia de los nominados. A pesar de las críticas, los legisladores de Morena y sus aliados defienden las designaciones, alegando que los perfiles cumplen con los requisitos necesarios.
La senadora Laura Ballesteros de Movimiento Ciudadano ha acusado a los legisladores de Morena de intentar «colonizar» el Tribunal con personas cercanas al presidente, mientras que el diputado Hamlet García de Morena ha destacado que los perfiles cumplen con los requisitos legales y poseen valores, honestidad y convicción social. Sin embargo, se señala que al menos uno de los nominados, Surit Berenice Romero, no cumple con los requisitos legales al no tener un título de abogada con 10 años de antigüedad, como exige la ley.