El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, reconoció que la relación entre ambas naciones enfrentará riesgos y desafíos con la llegada de Donald Trump a la presidencia en enero próximo. Durante un encuentro con empresarios en Ciudad de México, encabezados por Francisco Cervantes, presidente del CCE, Salazar destacó preocupaciones clave como la seguridad y la implementación de la reforma judicial, temas que afectan directamente la confianza de empresas estadounidenses en México.
Aunque señaló que los comentarios recientes de Trump podrían complicar la relación bilateral, el diplomático expresó confianza en que estos retos serán superados para avanzar en áreas críticas como el T-MEC, la migración y la seguridad fronteriza. Salazar subrayó la importancia de fortalecer el Poder Judicial mexicano como pilar de confianza y estabilidad democrática, enfatizando que este es un aspecto crucial para atraer inversión extranjera y consolidar la integración económica de América del Norte.
El embajador resaltó como positivo que México se mantenga como el principal socio comercial de Estados Unidos, mencionando que las importaciones chinas han disminuido un 5% desde 2018, reflejando un cambio hacia una mayor independencia económica en la región. Además, destacó la designación de Christopher Landau como subsecretario de Estado, valorando su conocimiento y aprecio por México como una ventaja para fortalecer la relación bilateral.
Finalmente, Salazar reconoció los esfuerzos de la presidenta Claudia Sheinbaum en materia de seguridad, particularmente en el combate al crimen organizado en estados como Sinaloa. Aunque admitió que vienen tiempos difíciles, insistió en que las oportunidades y la cooperación serán clave para mantener una relación sólida y productiva entre ambos países.