Luego de la galardonada y taquillera Titanic (88%), que regresó a cines este año por su aniversario, mucha gente bromeó con la posibilidad de que su director, James Cameron, pudiera estar muy interesado en la tragedia de la empresa OceanGate, aquella que llevó días de preocupación, pero también muchas burlas, sobre la desaparición y posterior implosión de un sumergible que llevaba a un grupo de personas en una expedición hacia los restos del Titanic.
Cameron había estado muy al tanto de los sucesos e incluso había opinado al respecto. En una ocasión le contó al equipo de BBC que sospechaba de la tecnología que usaba la compañía OceanGate y afirmó que no consiguieron los permisos adecuados para sus actividades porque sabían que no pasarían.
También dijo que él no se habría metido en ese sumergible, y sus palabras han sido escuchadas por sus conocimientos sobre este medio; además es una persona que ha completado 33 inmersiones sumergibles al naufragio del Titanic, así que muchos lo consideran lo consideran como una persona con experiencia en este tema.
Pero lo más curioso es que muchos asociaron al director con una posible película sobre la implosión del sumergible debido no solo a sus conocimientos, sino precisamente por ser el director de Titanic. No obstante, lo que se dijo estaba acompañado de rumores de que se encontraba en conversaciones para una producción sobre Titan y su fallida expedición hacia los restos del transatlántico británico que causó la muerte de cinco personas. La aclaración llegó a través de su cuenta en Twitter, donde dijo que usualmente no responde a “rumores ofensivos”.