El sindicato automotriz de Estados Unidos, United Auto Workers (UAW), declaró una histórica huelga la semana pasada, y la Industria Nacional de Autopartes (INA) en México ha advertido que esta acción podría tener un impacto significativo en la industria de autopartes del país.
En caso de que la huelga en Estados Unidos se prolongue por más de siete días, la INA pronostica una reducción en los niveles de producción y exportación en el sector de autopartes mexicano. Esta disminución podría alcanzar los 76 millones de dólares y representar el 0.1% de las exportaciones de autopartes mexicanas hacia Estados Unidos.
La huelga del UAW ha paralizado tres plantas en Estados Unidos, incluyendo las plantas de ensamblaje de Ford, Stellantis y General Motors. El sindicato busca un aumento salarial del 36% en cuatro años, mientras que las armadoras han ofrecido un aumento que no llega al 20%, lo que ha generado descontento entre los aproximadamente 15 mil sindicalizados.
Esta situación plantea desafíos significativos para la industria de autopartes en México y destaca la interconexión de la cadena de suministro automotriz entre ambos países. La duración y el resultado de la huelga en Estados Unidos tendrán un impacto directo en la producción y exportación de autopartes en México en las próximas semanas.