Guillermo ‘Memo’ Ochoa, uno de los futbolistas más emblemáticos de la Selección Mexicana, reafirmó que no piensa colgar los guantes antes de tiempo y tiene claro su gran objetivo: disputar su sexto Mundial en 2026. A sus 40 años, el arquero vive con ilusión el cierre de su carrera y lo quiere hacer defendiendo la camiseta del Tricolor en casa, ante su gente y con la oportunidad de ponerle la cereza al pastel a una trayectoria marcada por grandes momentos.
Tras conquistar su quinta Copa Oro con el equipo nacional —aunque sin sumar minutos en el torneo— Ochoa dejó claro que seguirá trabajando al máximo para ganarse su lugar con base en esfuerzo y no por nombre. “Voy a luchar y trabajar, no quiero que me regalen nada. Sería fantástico estar en este Mundial 2026, será muy diferente a los otros y quiero competir frente a mi afición y hacer un gran papel”, expresó en entrevista compartida por la Federación Mexicana de Futbol.
El guardameta del AVS Futebol de Portugal subrayó que mantenerse en la Selección es un privilegio y un compromiso que lo motiva igual que el primer día que se puso los guantes del Tri. Además, aseguró que quiere servir de ejemplo para la nueva generación que se integra al proyecto de Javier Aguirre. “Quiero que los jóvenes vean el compromiso, enseñarles la responsabilidad de estar aquí y defender este escudo, esto es más de dar que de recibir”, afirmó.
En la charla, Ochoa recordó uno de los momentos más icónicos de su carrera: la mítica atajada a Neymar en el Mundial de Brasil 2014, que lo catapultó a la fama internacional y le abrió puertas en Europa. “Antes de Brasil la gente me conocía solo en México, Estados Unidos y algo en Sudamérica. Esa atajada me cambió la vida, me llenó de orgullo demostrar que podía ser jugador de talla mundial”, recordó.
Pese a que su aventura europea lo llevó a clubes como Ajaccio, Málaga y Standard de Lieja, Ochoa confesó que se quedó con la espinita de no militar en un equipo de la élite del continente, aunque eso no le resta valor a su carrera. “No es sencillo jugar en equipos con presupuesto bajo y objetivos de mantener la categoría, me hubiera gustado pelear títulos y campeonatos europeos, pero he insistido y no me he caído”, compartió.
Con la experiencia de haber compartido vestidor con leyendas como Claudio Suárez y Rafa Márquez, el veterano guardameta se sabe parte de la historia del Tricolor y quiere cerrarla a lo grande, bajo los tres postes y en la Copa del Mundo que México organizará junto a Estados Unidos y Canadá.