La región pecuaria de Nuevo Laredo se ha incorporado a una estrategia estatal para prevenir y controlar la propagación del gusano barrenador del ganado, en una campaña impulsada por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA).
La primera fase de estas acciones consiste en brindar información directa a los productores sobre la biología del parásito, medidas preventivas y el procedimiento a seguir en caso de sospecha de infestación.
Así lo dio a conocer José Miguel Rodríguez Alcocer, integrante de la Asociación Ganadera de Nuevo Laredo-Ciudad Guerrero.
Con el respaldo de la Dirección de Extensionismo Pecuario y la Unión Ganadera Regional de Tamaulipas (UGRT), se han iniciado reuniones informativas en los 43 municipios del estado. Más de 900 ganaderos han sido capacitados hasta el momento.
“El objetivo es identificar plenamente la problemática, saber cómo actuar ante una sospecha de infestación y tomar las muestras necesarias para enviarlas a los laboratorios acreditados de salud animal”, explicó Rodríguez Alcocer.
El gusano barrenador, plaga altamente destructiva, fue detectado en noviembre de 2024 en el estado de Chiapas y ha avanzado hacia otras entidades del sureste mexicano como Tabasco, Quintana Roo, Oaxaca y Veracruz.
Esto representa un riesgo de expansión hacia regiones ganaderas del norte del país. Ante esta amenaza, el gobierno federal, a través de SENASICA —dependiente de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER)— ha intensificado los esfuerzos de vigilancia, control y erradicación, involucrando a gobiernos estatales y organizaciones pecuarias a nivel nacional.
Las autoridades sanitarias reiteraron la importancia de mantener la vigilancia constante en los hatos ganaderos y de reportar cualquier caso sospechoso de manera inmediata, con el fin de evitar afectaciones económicas graves en el sector