Sea la avenida Guerrero o bien la César López de Lara, ambas aparecen convertidas en el peor ejemplo de ruta sin orden vial por parte de operadores de camiones de carga, un tanto por la insuficiente vigilancia de elementos de Tránsito y otro por la incomodidad de maniobras que tienen que realizar para hacer alguna entrega.
En ambas arterias principales, en plena mañana o mediodía son recurrentes las escenas, tras una larga fila de vehículos y el sonar de cláxones, al fondo se observan las peripecias apuradas de algún conductor de camión de carga, que con apuro pretende entrar o salir a algún corralón.
Lo más insólito sucede en plena avenida Guerrero, al ser captado un camión de carga en tránsito de poniente a oriente, en un intento de retomar por plena avenida Reforma hacia la parte sur de la ciudad.
