La diabetes mellitus, conocida como la “enfermedad silenciosa”, se ha convertido en una de las principales causas de consulta en las instituciones de salud de Nuevo Laredo.
Esta enfermedad crónica, caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre, afecta a miles de personas y presenta complicaciones que impactan significativamente la calidad de vida y la supervivencia de quienes la padecen.
De acuerdo con datos oficiales de la Secretaría de Salud, en esta ciudad se registran aproximadamente 1,400 pacientes diagnosticados con diabetes. Sin embargo, debido a la falta de datos precisos de instituciones como el IMSS o el ISSSTE, se estima que el número real de personas afectadas podría ser mucho mayor.
Cada 14 de noviembre se celebra el Día Mundial de la Diabetes, un recordatorio de la importancia de crear conciencia sobre esta enfermedad y sus graves consecuencias, que incluyen insuficiencia renal, amputaciones y ceguera.
Estas complicaciones, además, posicionan a la diabetes como una de las principales causas de muerte en la región.
CONTROL Y PREVENCIÓN: CLAVES PARA ENFRENTAR LA ENFERMEDAD
El doctor Gregorio Jesús Ortegón Martínez, médico adscrito a la Unidad “Américo Villarreal” y especialista en consulta privada, destaca que la diabetes es el principal motivo de consulta en las Unidades Médicas, junto con la hipertensión.
Según sus observaciones, gran parte de los pacientes acude para el manejo de esta condición crónica.
En la Jurisdicción Sanitaria V, el programa del Adulto y el Anciano reporta que, de los 2,500 pacientes crónicos registrados, 1,400 son diabéticos. Más del 60% de ellos son mujeres, lo que subraya la necesidad de enfoques diferenciados en las estrategias de salud pública.
La Secretaría de Salud ha implementado campañas de detección temprana con el objetivo de identificar la enfermedad en etapas iniciales.
No obstante, el reto persiste: muchas personas buscan atención médica únicamente cuando los síntomas son graves, reduciendo las posibilidades de un tratamiento eficaz.
CONSECUENCIAS DEVASTADORAS
El doctor Ortegón advierte sobre las complicaciones más comunes de la diabetes, como la insuficiencia renal que lleva a la necesidad de diálisis, amputaciones debido a problemas vasculares y ceguera, la cual aunque menos visible, tiene un impacto profundo en la calidad de vida.
“La adopción de un estilo de vida saludable es fundamental”, asegura. Cambiar hábitos, como llevar una dieta equilibrada, realizar ejercicio regular y someterse a chequeos médicos periódicos, puede marcar una gran diferencia en el pronóstico de los pacientes.
UN LLAMADO A LA ACCIÓN
Las autoridades de salud instan a la población a realizarse chequeos regulares en las Unidades Médicas, disponibles incluso los fines de semana. La detección temprana y el tratamiento adecuado pueden prevenir complicaciones graves y salvar vidas.
La lucha contra la diabetes requiere del compromiso de todos: pacientes, profesionales de la salud y la comunidad en general.
Adoptar hábitos saludables y fomentar la detección temprana son pasos esenciales para combatir esta “enfermedad silenciosa” y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.