Tras asegurar que las mascarillas han sido factor clave y determinante en la caída de los contagios, hospitalizaciones y muertes, las autoridades sanitarias recomendaron ayer a la población a continuar utilizando esta protección y las demás medidas preventivas contra el COVID-19, hasta no ver que la pandemia desaparezca, lo cual tomará mucho más tiempo.
El doctor Víctor Treviño, Autoridad Médica del Departamento de Salud y el coordinador del Manejo de Emergencias, Guillermo Heard, coincidieron en señalar que “aún no es tiempo de cantar victoria”, refiriéndose a la nueva orden del gobernador, quien eliminara el martes todas las medidas de prevención a nivel estatal.
En la conferencia de prensa de ayer, ambos funcionarios señalaron que por otro lado Laredo aún no alcanzado el 75-80 por ciento en su cobertura de vacunación, por lo tanto, resultaría muy prematuro que la comunidad dejara a un lado los tapa-bocas.
“Aún no hemos llegado a una cobertura amplia, aunque las métricas de la pandemia se hayan ido hacia abajo, por lo que recomendamos que sigan con los protocolos sanitarios, en escuelas, hospitales y negocios”, dijo Heard.
Y agregó que es necesario seguir con los esfuerzos preventivos, para bajar más los casos, poco a poco, sin bajar ni un milímetro la guardia.
El doctor Treviño, por su parte que aunque Laredo se encuentra en números históricos, no se puede levantar aún las prevenciones para mitigar los contagios, pues médicamente está comprobado que las mascarillas ayudaron también a que se bajaron las infecciones de la gripe común, pues sólo se registraron 600 en la ciudad, cuando el año pasado brotaron 27 mil casos, durante la temporada que inicia en octubre y termina el 31 de enero, cada año.
En el contexto de la vacunación, Treviño anunció que ahora ya todos los maestros de todos los niveles, incluyendo los de pre-kinder y kínder, estarán incluidos en la categoría de personas prioritarias dentro de los esquemas de vacunación, lo cual representará otro golpe bajo a la pandemia.