Toda la temporada de huracanes tendrá como modalidad la integración regional de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para resolver cualquier eventualidad que dañe el suministro de energía eléctrica local ocasionada por algún fenómeno meteorológico.
Los dos recientes fenómenos naturales que tuvieron cierta afectación en la ciudad, como fue el Huracán “Alberto” y “Beryl”, que por fortuna no pasaron a mayores consecuencias, dejaron la experiencia de fortalecer las cuadrillas de emergencia de CFE.
De acuerdo la información aportada en una de las Superintendencia de la CFE, Nuevo Laredo tendrá además de sus cuadrillas de emergencia, el apoyo de la División Golfo Norte y la División Norte para resolver eventuales daños dejados por las tormentas.
La temporada de huracanes está contemplada del primero de junio al 30 de noviembre, según la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, donde por igual se establecer que la región de Nuevo Laredo es zona de paso de estos fenómenos climatológicos.
Como parte de la coordinación que CFE mantiene con Protección Civil Municipal y otras dependencias, los efectos de este fenómeno natural en esta ocasión solo registraron como lluvias de medianas a intensas.
El apoyo de las dos divisiones Golfo Norte, están contempladas para intervenir en aquellos casos donde la CFE Nuevo Laredo se vea con mayor necesidad técnica debido a la cantidad de daños que pudieran ser ocasionados por alguna tormenta.
Se hizo saber que, para atender estas eventualidades derivadas de fenómenos naturales, la CFE se apoyaba en datos históricos sobre daños registrados por tormentas, en colonias ubicadas como zonas de inundación.