El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha anunciado su solicitud al fiscal general, Rodolfo Delgado, para investigar a todos los miembros de su gabinete, reiterando su compromiso contra la corrupción y prometiendo la construcción de una prisión exclusiva para políticos y funcionarios corruptos.
Durante un discurso televisado, Bukele afirmó su determinación para que su legado sea recordado como el presidente que no toleró la corrupción ni permitió que nadie robara, anunciando medidas drásticas contra aquellos involucrados en actos ilícitos. Además, señaló la destitución de cualquier funcionario de su Gobierno que cometa ilegalidades.
El presidente solicitó a la Asamblea Legislativa una licencia para poder dedicarse por completo a su campaña para las elecciones presidenciales de febrero de 2024. A pesar de su eventual ausencia de la Presidencia, aseguró que seguirá involucrado en los asuntos del país para evaluar su situación continuamente.
La candidatura de Bukele para la reelección presidencial ha generado controversia, dado que la Constitución salvadoreña establece una teórica prohibición de dos mandatos consecutivos, aunque una decisión del Tribunal Constitucional ha abierto la posibilidad de que Bukele renuncie seis meses antes de finalizar su mandato para poder presentarse a las elecciones.
Bukele, reconocido por su enfoque agresivo en la lucha contra las pandillas en El Salvador, ha encarcelado a numerosos presuntos pandilleros e implementado medidas severas. A pesar de las críticas, su estrategia ha sido respaldada en encuestas, que muestran un apoyo considerable hacia el mandatario y sus políticas de seguridad.