El Barcelona se proclamó campeón de LaLiga española por vigésima octava vez en su historia tras imponerse 0-2 ante el Espanyol en la jornada 36 del campeonato, con una actuación estelar del joven Lamine Yamal, quien marcó un golazo y dio una asistencia.
Con este triunfo, el conjunto dirigido por Hansi Flick alcanzó una ventaja de siete puntos sobre el Real Madrid, cuando solo quedan seis unidades por disputarse, asegurando matemáticamente el título y completando un triplete nacional, tras ganar previamente la Copa del Rey y la Supercopa de España.
En un partido que inició con dominio del Espanyol en el RCDE Stadium, los locales generaron varias ocasiones claras, especialmente por conducto de Javier Puado, quien puso a prueba al arquero azulgrana Wojciech Szczesny.
Por su parte, el Barcelona apenas inquietó con algunos disparos de Robert Lewandowski, y se fueron al descanso con el marcador en blanco. Sin embargo, el partido cambió completamente en la segunda mitad con la aparición de Yamal.
A los 53 minutos, el juvenil controló el balón en el costado derecho, recortó hacia el centro y con su pierna zurda envió un disparo que se clavó en el ángulo superior derecho, abriendo el marcador con una auténtica obra de arte.
Minutos después, Yamal también provocó la expulsión de Leandro Cabrera, quien reaccionó con un golpe en el estómago tras ser superado en velocidad. Ya en tiempo agregado, el propio Yamal asistió a Fermín López, quien selló el triunfo con un disparo cruzado para el 0-2 final.
Con esta victoria, el Barça celebró un nuevo título liguero y confirmó el impacto de una nueva generación liderada por el talentoso Yamal, quien se erige como la figura más prometedora del equipo.