El festival AXE Ceremonia ha estado bajo una fuerte ola de críticas luego de la trágica muerte de los fotógrafos Berenice Giles y Miguel Hernández, quienes perdieron la vida el pasado sábado mientras realizaban labores periodísticas en el evento. El incidente ocurrió en el Parque Bicentenario, ubicado en la alcaldía Miguel Hidalgo de la Ciudad de México, cuando una estructura colapsó y aplastó a los jóvenes, generando indignación en distintos sectores de la sociedad, especialmente entre comunicadores y periodistas que exigen justicia y mejores garantías para la seguridad de los trabajadores del sector.
El festival ha sido severamente cuestionado tanto por su manejo del suceso como por la falta de comunicación y apoyo a las familias de las víctimas. Aunque los organizadores emitieron breves comunicados en los que aseguraban estar en contacto con los familiares, el padre de Berenice desmintió estas afirmaciones, indicando que no han recibido ningún tipo de apoyo. Lo que ha causado mayor molestia es la decisión de los organizadores de cerrar sus redes sociales en lugar de afrontar la crisis, lo que ha sido interpretado por muchos como un intento de ocultar la responsabilidad en el accidente.
En un giro dramático, AXE Ceremonia eliminó todo el contenido de su cuenta oficial de Instagram y cambió su foto de perfil a una imagen en color negro, lo que fue interpretado por miles de seguidores como un gesto de luto. En su lugar, solo se publicó un comunicado lamentando las muertes y afirmando que colaborarían con las autoridades para esclarecer los hechos. Sin embargo, los perfiles de AXE Ceremonia en otras plataformas como X y Facebook continúan activos, donde los usuarios han expresado su indignación y exigido justicia. En Facebook, las publicaciones están inundadas de reacciones de enojo, especialmente con el uso del emoji de cara enojada.
Las autoridades locales siguen investigando el caso. Bertha Alcalde, fiscal de la Ciudad de México, ha asegurado que se está investigando tanto a los organizadores del evento como a las autoridades de la alcaldía Miguel Hidalgo para determinar las responsabilidades en este trágico accidente. Mientras tanto, la presión pública continúa creciendo en busca de justicia para los jóvenes fotógrafos.

