El aumento de aranceles impuesto por el gobierno de Donald Trump a las importaciones de México, Canadá y China amenaza con elevar los costos de bienes esenciales para los consumidores en Estados Unidos. Productos como fresas, aguacates, tequila, automóviles y combustible experimentarán un alza de precios, afectando directamente a las familias.
Brian Cornell, director de la cadena de supermercados Target, advirtió que el impacto de los aranceles será casi inmediato en productos frescos, especialmente aquellos provenientes de México, de donde Estados Unidos importa el 72.5% de sus frutas y verduras. Según un estudio de la Universidad de Yale, estos impuestos podrían generar un aumento del 1 a 1.2% en el costo de vida, lo que se traduciría en un sobrecosto anual de entre 1,600 y 2,000 dólares por hogar.
El sector automotriz también sufrirá las consecuencias. Según Anderson Economic Group, los aranceles a los autos podrían aumentar el precio de cada vehículo entre 4,000 y 10,000 dólares. Jessica Caldwell, de la consultora Edmunds, alertó que los fabricantes no podrán adaptarse rápidamente, lo que obligará a trasladar los costos adicionales a los compradores.
Otros sectores igualmente afectados serán la construcción y la energía. La gasolina podría encarecerse hasta 40 centavos por galón en los próximos meses, mientras que los aranceles a la madera canadiense incrementarán los costos en la industria de la construcción. A pesar de estos efectos, Trump defiende su estrategia, asegurando que es parte de un proceso para «traer riqueza de vuelta a Estados Unidos».