MARIO AGUILAR
En preparatoria municipal no hay restricciones para vestimenta de alumnos, siempre y cuando se respeten los colores. Además, no hay restricciones para tatuajes, cabello largo o pintado e incluso aretes.
Ellas de falda y ellos de pantalón. Ahora los alumnos de algunas preparatorias municipales, o al menos la “Manuel Gómez Morín”, no tendrá restricciones ni presiones en contra de los estudiantes, ya que confirman podrán escoger falda o pantalón como parte de su vestimenta diaria.
Sea hombre o mujer, ambos tendrán el derecho de vestir o portar la prenda de su elección.
Ya sea mujeres en pantalón u hombres en falda no habrá restricciones, esto siempre y cuando se respete el color del uniforme, color Beige (caqui) en falda o pantalón y camisa o blusa blanca.
Javier Lozano Rodríguez, director de la Preparatoria “Manuel Gómez Morín”, ubicada en el sector de Reservas Territoriales, al poniente de Nuevo Laredo, confirmó que el deseo de vestimenta del alumno se respeta, todo siempre y cuando los padres de familia estén en común acuerdo con el alumno.
De manera concreta señaló que la escuela no lo perite, pero sí hay acuerdos entre estudiantes y padres, la escuela no se opondrá.
“Nosotros manejamos muy sencillo el tema del uniforme, es blanco en la parte de arriba y caqui en la parte de abajo. Pantalón o falda, nosotros no tenemos ningún problema si el niño quiere llevar falda o la niña quiere llevar pantalón. No esencial es que la vestimenta que porten sea una herramienta útil para los jóvenes y les de identidad cuando estén en calle. Vivimos en una sociedad que se rige por reglas pero todo lo tratamos con el padre de familia y tenemos una política en donde si el niño quiere llevar el pelo largo, quiere llevar aretes, pues nada más que nos avise, para nosotros tener cocimiento que el papá está de acuerdo y es que muchas veces el alumno va y dice en su casa que la escuela lo permite, no es que lo permitamos, pero si respetamos la libertad que tiene en hacerlo y si es con el consentimiento del papá, la escuela lo respeta”, expresó Lozano Rodríguez.
El uso de la falda para las niñas y pantalón para los niños no había sido objeto de debate hasta apenas hace unos años, cuando empezó a contemplarse como un objeto de discriminación para las mujeres, ya que les complicaba las actividades al aire libre o deportivas.
Además, este debate también sirvió para cuestionar los roles de género y para defender una mayor libertad para que los niños manifiesten su autoimagen.
 
 
			 

 
 








