La presidenta Claudia Sheinbaum respondió con firmeza a las declaraciones del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, quien sugirió que las problemáticas de Canadá no podían compararse con las de México. En su conferencia matutina, Sheinbaum subrayó que México no caerá en provocaciones y enfatizó la importancia del respeto mutuo entre socios comerciales.
Sheinbaum destacó que, aunque cada país enfrenta desafíos distintos, Canadá y Estados Unidos tienen graves problemas relacionados con el consumo de fentanilo, una crisis que en México permanece a niveles significativamente más bajos. Explicó que México no está exento de problemáticas de adicción, pero la situación es distinta y no comparable con la de sus vecinos del norte.
Sobre los comentarios de políticos canadienses en el contexto de su próximo proceso electoral, Sheinbaum hizo un llamado a evitar que México sea utilizado como tema de campaña. Enfatizó la riqueza cultural e histórica de México, resaltando su legado de más de tres mil años de civilizaciones prehispánicas como un elemento que distingue al país.
En cuanto a las versiones de una posible intervención estadounidense con agentes en territorio mexicano para combatir al narcotráfico, Sheinbaum rechazó tajantemente esta opción. Aseguró que no se permitirá ningún tipo de invasión o presencia similar, reafirmando que su gobierno continuará coordinándose con Estados Unidos en temas de seguridad, pero bajo condiciones de respeto a la soberanía nacional.
Sheinbaum también anunció el relanzamiento de una campaña contra el consumo de drogas, especialmente las químicas, debido a sus efectos letales y altamente adictivos. Enfatizó la necesidad de prevenir el acceso de los jóvenes a estas sustancias, advirtiendo sobre la devastadora crisis del fentanilo en Estados Unidos, que cobra la vida de cientos de miles de personas cada año.