El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha comenzado a conformar su gabinete para su próximo mandato, integrando figuras clave de su administración anterior y estableciendo una dirección conservadora y de “mano dura”. Entre los nombramientos más destacados se encuentra Stephen Miller, conocido por sus políticas migratorias restrictivas, quien se perfila como subdirector de políticas de la Casa Blanca. Miller fue el arquitecto de medidas como el muro fronterizo y la controvertida política de separación familiar en la frontera con México. JD Vance, vicepresidente electo, elogió esta elección en redes sociales.
Trump también designó a Lee Zeldin, excongresista de Nueva York, como jefe de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), resaltando su enfoque en desregulación y políticas de “Estados Unidos primero”. Además, la congresista Elise Stefanik será la nueva embajadora ante la ONU, conocida por su carácter fuerte y apoyo a las políticas republicanas.
En el ámbito de política exterior, el senador Marco Rubio, quien será el primer latino en ocupar el cargo de secretario de Estado, liderará las relaciones internacionales con una postura firme hacia China, Irán y Cuba, buscando consolidar el apoyo latinoamericano.
Desde México, la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró su compromiso con la protección de los derechos de los mexicanos en EE. UU., reforzando la cooperación y vigilancia en la frontera sur para frenar la migración irregular.