Ciudadanos y personas dedicadas al autotransporte sufren por el mantenimiento que se le está dando a la autopista de Nuevo Laredo-Monterrey en el área de Nuevo León, en específico de las cuestas de mamulique.
Y es que estas reparaciones tienen semanas y afectan en gran manera el tráfico, principalmente de Nuevo León a Tamaulipas, ya que a diario y en ciertos horarios, la fila se extiende por hasta dos kilómetros.
“De ida a Monterrey es a algunas horas, pero sí se ve de regreso las largas filas de tráiler y hasta algunos carros particulares esperando por horas a que se abra la circulación”, comentó Felipe, operador de tractocamión.
Y es que esta zona, de las cuestas de mamulique, es una de las más complicadas para poder circular, por lo que deben parar el tráfico o avanzar en un solo cuerpo asfáltico de ida y vuelta.
Los ciudadanos que viajan por diversos motivos, también están preocupados por esta situación, ya que muchos deben llegar por temas de trabajo, salud o compromisos a tiempo a sus destinos.
“Es un volado cada vez que uno sale a Monterrey, se supone que la autopista es más rápida, pero uno viene mejor usando la libre, porque te tardas más por allá, pero luego por lo mismo ha habido más accidentes porque tiene más tráfico”, explicó Diana Alvarado.
El Gobierno de Nuevo Laredo, envió un exhorto urgente a la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes con el objetivo de que tomen cartas en el asunto, ya que al ser una ciudad prominentemente dedicada al comercio, es necesario que haya vías de calidad y eficientes.