Durante un acto electoral en Pensilvania, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, contó con el respaldo del influyente clan Kennedy, marcando un movimiento estratégico para contrarrestar la candidatura independiente de Robert F. Kennedy Jr., quien podría impactar en estados clave.
Mientras tanto, el expresidente Donald Trump se encuentra inmerso en un juicio penal en Nueva York por la falsificación de documentos durante su campaña en 2016, lo que representa un contraste notorio con la actividad política de Biden.
El respaldo de los Kennedy a Biden se hizo evidente durante el evento en Filadelfia, donde varios miembros del clan se unieron al presidente demócrata. Kerry Kennedy, hija del ex fiscal general Robert F. Kennedy, enfatizó la importancia de la elección entre Biden y Trump, sin mencionar a su propio hermano, Robert F. Kennedy Jr., considerado la «oveja negra» de la familia.
Biden, quien tiene un busto de Robert F. Kennedy en su despacho oval, expresó su gratitud por el apoyo de la familia Kennedy, resaltando la importancia de la elección de 2024 como un momento crucial para definir el futuro de Estados Unidos.
Por otro lado, Trump continúa su batalla legal en Nueva York, enfrentando múltiples cargos relacionados con sus acciones durante su presidencia y su campaña de reelección.
El respaldo de los Kennedy a Biden subraya la seriedad con la que la campaña demócrata toma la amenaza de la candidatura independiente de Robert F. Kennedy Jr., cuya presencia en las papeletas podría influir en el resultado electoral en estados cruciales como Pensilvania.
En un momento en el que la política estadounidense se encuentra dividida y polarizada, la participación de figuras prominentes como los Kennedy y la situación legal de Trump añaden un elemento de intriga y tensión a la carrera presidencial.
