Debido a esa situación, el INE se ha visto obligado a emitir hasta cinco convocatorias en busca de profesionistas interesados en el trabajo.
Porque no han resistido la carga de trabajo, alrededor de 400 capacitadores y asistentes electorales han presentado su renuncia, poniendo en aprietos al Instituto Nacional Electoral, (INE) porque enfrenta un déficit de personal.
Sergio Iván Ruiz Castellot, titular del INE en Tamaulipas, explicó que cuando las personas solicitan el empleo lo hacen con una idea muy diferente a lo que realizarán, por lo que ya una vez en ejercicio de sus tareas terminan rebasados o no pueden con ellas.
“Muchos de los capacitadores contratados llegan con una idea diferente de lo que es un proceso electoral, pero cuando se dan cuenta de lo complicado y desgastante que puede llegar a ser este trabajo optan por renunciar” detalló.
Debido a esa situación, el INE se ha visto obligado a emitir hasta cinco convocatorias en busca de profesionistas interesados en el trabajo.
Estimó que se requerirán de un promedio de un mil 234 capacitadores y 220 supervisores, tomando en cuenta que serán instaladas en Tamaulipas 4 mil 296 casillas, para los cuales se necesita la participación aproximada de 40 mil funcionarios que deberán ser capacitados.
La primera responsabilidad del capacitador es localizar a los ciudadanos y notificarlos, lo cual es algo complejo porque requiere visitar muchas veces un domicilio, incluso sábados y domingos y en horario nocturno.
En promedio, un supervisor electoral percibe entre 13 y 15 mil pesos de sueldo mensual, pero de ellos debe cubrir gastos de campo, los que varían dependiendo de la zona en la que les toque trabajar, mientras que el sueldo del capacitador ronda los 12 mil pesos.